miércoles, 27 de agosto de 2008

Ladran, luego cabalgas. ¡Ánimo Gorki!

Nunca me ha gustado la estética punk ni la música que suele rodearla. Pero no importa. Hay muchas cosas que no me gustan y gente habrá a la que tampoco le guste mi forma de pensar, de vestir, de hablar o de actuar. Pero no importa. Nadie me impone vestirme como ellos ni escuchar su música. A nadie le impongo mi presencia o mis ideas.

Leo en el blog de Yoani que en Cuba han detenido a Gorki, líder del "grupo de punk rock más controvertido de Cuba", según dicen ellos de ellos mismos en su página web, cuyo nombre, "Porno para Ricardo", y su logo, dan ya ciertas pistas sobre su rebeldía. Al parecer, lo acusan de un delito de peligrosidad predelictiva. Sí, han leído bien.

Y como ellos lo cuentan mejor, lean el relato de su detención. Desde aquí, solo puedo desear que el pueblo cubano recupere pronto su libertad. ¡Ánimo Gorki!





4 comentarios:

Ignacio Díaz Pérez dijo...

Eso se llama "presunción de culpabilidad"... Todos culpables en nombre de la revolución, mientras el comandante no diga lo contrario...

Saludos

Anónimo dijo...

Ayer vi un poco de la presentación de la película española Los girasoles ciegos, que está ambientada en la posguerra.
Maribel Verdú decía algo así como que lo terrible es que te encarcelen o te maten por las ideas. Algo terrible que nos recuerda un pasado nuestro no tan lejano.
Besos solidarios.

Anónimo dijo...

Lo de la detención de Gorki es simplemente... demencial.

Te copio... ¡Ánimo Gorki!

Er Tato dijo...

Pues sí, queridos -y queridas, ¿o era el revés?-, demencial, como dice Glauca.

Todavía me cuesta asimilar el dichoso sintagma. Peligrosidad predelictiva. Manda cojones, como diría aquel seudopoeta, el del perejil y un "al alba, con tiempo duro de levante..." que le salió del alma.

¡Hala! Un par de rondas de mojitos a la salud del irreverente Gorki, que invita la casa.

Besos con hielo picao y yerbabuena