martes, 20 de abril de 2010

Para que no me olvides, ni siquiera un momento...

Con tanto volcán, el islandés y el garzoniano, se nos olvida que, aunque no se debe confundir lo urgente con lo importante, el asunto de la reforma laboral es no sólo importante, sino también urgente.

Un año y millón y pico de parados más tarde, estamos igual. Es decir, nada por aquí, nada por allá y cada vez peor. Mientras no se le meta mano a nuestro sistema de negociación colectiva y al mercado dual, el paro seguirá creciendo, los escasos puestos de trabajo que se creen serán precarios y la productividad de nuestros trabajadores se mantendrá en niveles muy poco competitivos.

Por ejemplo, uno no termina de entender por qué los sindicatos están en contra de la creación de un contrato indefinido con, digamos, 20 días de indemnización, respetando los derechos adquiridos de quienes ya fuesen indefinidos hasta ese momento. De esa forma, los trabajadores sobreprotegidos, aquéllos por los que se desviven los sindicatos aunque sean los que menos lo necesitan, seguirían estándolo, y quienes hasta ahora sólo podían aspirar a contratos temporales con escasa o nula protección por despido, pasarían a mejorar su protección hasta los 20 días de indemnización. Es decir, todos ganan. ¿Entonces?

El único argumento esgrimido por los sindicatos que he leído contra ese planteamiento es el temor a un efecto sustitución. Es decir, que los empresarios se plantearan empezar a sustituir trabajadores con 45 días de indemnización por trabajadores con el nuevo contrato. A poco que se echen algunos números, llega uno a la conclusión de que ese efecto es bastante improbable y, en todo caso, minoritario. Pero asumamos la hipótesis sindical como posible. La solución es bien sencilla: que los trabajadores sobreprotegidos contabilicen 45 días por cada año de antigüedad hasta la entrada en vigor del nuevo contrato y 20 días a partir de esa fecha. Los trabajadores que actualmente gozamos del privilegio de tener un trabajo estable y bien protegido frente a despidos improcedentes, ¿no seríamos capaces de tal generosidad? Por lo que a mí respecta, ¿dónde hay que firmar?


13 comentarios:

Cita Franco dijo...

Es cierto que hay prioridades, pero no nos podemos olvidar de las largas colas y las listas de espera.

Gracias por el recordatorio Tato

Un beso

Cita

Juanma dijo...

Me voy por una tangente, o no, no lo sé:
¿Cuántos trabajadores, querido Tato, crees que secundarían una huelga en condiciones de libertad (la cuales nunca se dan)? Es decir: sin que medien presiones empresiariales ni sindicales (los piquetes informativos, por cierto, deberían estar prohibidos. En mi opinión). Y el derecho a la huelga, en fin...
Pienso que hay una inmensa cantidad de trabajadores desprotegidos, gente que no quiere ir más allá de cumplir con su trabajo, sin más. Sin que ello suponga que todo les da igual, que no quieren mejorar sus condiciones laborales, etc, etc. Estos trabajadores no suelen estar todo lo bien considerados que debieran en las empresas, donde el miedo a la acción sindical suele imperar en tantas ocasiones. Pero tampoco son trabajadores que "interesen" a los sindicatos, que los ven más cercanos a los malos que a los buenos (en esa división tan simple entre malos -empresarios- y buenos -trabajadores, sobre todo los sindicados- que tienen en la cabeza).

Por otro lado, vengo de leer el debate que tuviste en el blog "Sombras chinescas". Enhorabuena, hermano, por saber usar el lenguaje según el principio elemental de la lógica: dada una premisa, se deduce de ella una conclusión necesaria. Cuando eso se sabe hacer, los argumentos expuestos son irrebatibles.

Abrazos.

Er Tato dijo...

De nada, Cita. A veces nos pasa a todos aquello de que el árbol no nos deja ver el bosque. En este caso, la invisibilidad la han provocado unas cenizas. Y quizás algunos cenizos.

Pues sí, querido Juanma, te vas un poco por la tangente, pero para eso estamos en una taberna ¿no? En nuestro país no hay una ley de huelga porque hay intereses para que ello sea así, saltándose a piola la propia Constitución durante más de 30 años (art. 81.1 Son leyes orgánicas las relativas al desarrollo de los derechos fundamentales y de las libertades públicas..., estando contenidos esos derechos fundamentales y libertades públicas en los artículos 15 al 29 de la propia CE y refiriéndose el 28.2 al derecho a la huelga). La regulación actual es de 1.977 mediante un Real Decreto Ley, pero aquí no pasa nada. En cuanto a los trabajadores que se limitan a cumplir, pues hay de todo, como entre los empresarios. Lo grave es que sea un convenio colectivo el que venga a decir que debe ganar lo mismo el que se limita a cumplir, que el que ni siquiera llega a eso. En cuanto al debate, por llamarlo de alguna manera -vaya por delante mi agradecimiento a Juan Carlos por el abuso de confianza-, simplemente subrayar la enorme diferencia de tono entre la primera y la segunda respuesta de mi interlocutor. No suele gustar la sinceridad, aunque reconozco que soy un poco cabroncete... ;-)

Besos empolvados de albero

mangeles dijo...

Yo sigo sin ver eso de que las indemnizaciones son las que perjudican el empleo. Como antiguamente decían que era el empleo fijo...y los contratos temporales no solucionan nada.

Realmente no tengo ni idea de que es lo que ocurre. Yo sigo creyendo que los empresarios españoles son muy "poco eficaces". No creen en la empresa que crean, sino que creen en "ellos mismos". Su visión de la empresa es la de "su casa". Todo es suyo. Y una empresa es algo "con vida propia". Si una empresa es eficaz, y tiene 10 puestos de trabajo, pues el empresario debería pensar que personas precisa en esos puestos, que servicios quiere dar a los clientes, y que trabajador es el mejor en cada puesto, y buscarlo. Simplemente.

La exigencia ahora mismo es "avaricia". Los despidos entre los empleados más baratos para el empresario, llega al punto de la "explotación". A los trabajadores inmigrantes les estan "robando" y "explotando" . A los españoles los pagan en dinero b, y les obligan a hacer horas extras.

A los empleados de "lujo", les están quitando los complementos y plus. Los comerciales ganan más que los directivos, lo que produce una insatisfacción general.

Las empresas no tienen absolutamente nada previsto. Si venden el producto generan empleo. Si no venden, al no tener activo alguno cierran y se acabó.

Eso es lo que yo veo todos los días, Tato.

A los trabajadores realmente las indemnizaciones no les sirven para nada....pan para hoy y hambre para mañana. ( A los despachos de abogados siiii...que de eso vivimos jeje). A un trabajador lo que le sirve es tener un trabajo continuado.

Si no tuvieramos indemnizaciones, muchos ya habríamos cambiado de curro hace mucho jejejej

Besosss...

Vaya rollo que me he marcado...para incordiar ejjeje

mangeles dijo...

Ahh..y se me olvidaba. Vivimos en unas sociedades "capitalistas". Quien tiene trabajo come, quien no tiene trabajo no come.

Si no hay trabajo para los poco inteligentes, los vagos, los perezosos, los flojos y faltos de iniciativa...."la violencia es algo que se le dá bien a casi todo el mundo"....Y si es la "ley de selva" pues a eso....podemos jugar casi todos....

El sistema, tiene que garantizar la posibilidad de ganarse la vida...sino...el sistema no funciona y tendremos que cambiarlo.

Más besos

Er Tato dijo...

Las indemnizaciones son un elemento más, Mangeles. La reforma laboral no consiste sólo en el abaratamiento de los costes de despido. Ni las reformas estructurales necesarias para salir de la crisis se limitan sólo a la reforma laboral. Ésta es necesaria, pero no suficiente.

En cuanto al resto de tu comentario, no comparto prácticamente nada, salvo quizás eso de que si no tuviéramos indemnizaciones, se incrementaría la movilidad laboral. Y, siendo que opinas así, ¿no crees que en la medida en que se abarate el despido -no tener indemnizaciones sería el caso extremo de abaratamiento-, se mejoraría la movilidad y los empresarios tendrían menos miedo a contratar y mejoraría el empleo, contrariamente a lo que dices al principio?

Besos, guapa. Y una copita de manzanilla fresquita con unos langostinos de Sanlúcar. Que no se diga que en la taberna no cuidamos a los parroquianos. Y a las parroquianas, que diría Pajín, y Bibiana, y Toxo, y Méndez, y Blanco, y....

mangeles dijo...

Yo por mí lo haría. Si hay desempleo no hace falta la indemnización. Pero...estoy segura de que no cambiaria nada.

La gente que tiene dinero aspira a tener más dinero...es un vicio...es algo enfermizo...

Los empresarios solo quieren tener dinero...es algo patológico..

Como los trabajadores (incluidos empresarios) que ven en el trabajo un "castigo divino"...o "la forma única y maravillosa de vivir"...

Es algo enfermizo...el trabajo es un castigo,...el trabajo es lo que justifica la existencia...

A mí me gusta mucho trabajar. Pero mi vida no es el trabajo. Ambas cosas son factibles.

Besotes, Tato...

Y me pido un fino fresquito y una tapa de jamón 7 jotas y unas gambitas de Huelva....que paga el Juanmita

Más besos

Manupé dijo...

Ni un paso atrás.

Cada derecho adquirido por un trabajador, lo es a pura fuerza. No hay empresario=hermanita de la caridad, nadie regala nada y sinceramente, no creo que sea la solución.

Me parece más una medida para ampliar el margen de beneficios del patrón que un incentivo para crear empleo.

A más ver.

Er Tato dijo...

¡A las barricadas pues, amigo Manupé, compañero del metal! ¡Hasta la última gota de nuestra sangre! Pero eso sí, en horario de oficina y jornada reducida que estamos en Feria, antes en Semana Santa y Carnavales, después en el Rocío, más tarde en vacaciones estivales, y total, las barricadas no las van a mover de sitio...

Y yo no he dicho que sea la solución, sino que forma parte de la solución. En cuanto a la opinión que te merecen los empresarios, pues es eso, tu opinión.

Saludos

Manupé dijo...

Pues sí, me ha faltado cantar aquello de:
Arriba, parias de la Tierra. En pie, famélica legión. Atruena la razón en marcha, es el fin de la opresión......

En cuanto a los empresarios, yo no he opinado sobre ellos, constato una realidad, esto es:

Empresario no es igual a hermanita de la caridad.

Salud camarada y a más ver ( si puede ser en feria y en tu caseta, y si no en el Rocío y en tu carreta). A la playa, invito yo.

Karol_a dijo...

Pues a mi la indenización no me parece algo interesante, es un soplo de aire y luego te ahogas, lo importante es trabajar con un trabajo digno continuado que sea valorado tanto en su calidad como en su remuneración, y además sin esa gran diferencia de salarios, un gerente de empresa 18 millones al año, y el trabajador que es el que lleva el funcionamiento de la empresa, no llegue a ni a cinco,que encima en los convenios, luche po rno subir ni un 1% y el se ponga su propio sueldo dietas de escándalo y encima sea un mal gerente, que los hay ... esas diferencias son las que arruinan las empresas,y crean malas auras, y otras muchas más...
En cuanto a las vacaciones Tato, el disfrute de todas esas fiestas ¿un trabajador? ¿dónde? ¡Qué suerte!, dime si no serán los jefes porque yo solo tengo 22 días al año de vacaciones y encima no las elijo cuando a mi me dé la gana, ni siquiera podría hacer coincidir tales fechas, creo que si crees eso realmente conoces a pocos trabajadores no? que vayan a y tengan libre todas esas fechas de fiestas, menuda prensa, eso a lo mejor lo haces tú y hablas por ti? porque yo soy una trabajadora normal como todos y todos no tenemos esas vacaciones.
Un abrazo Tato.
Hay cosas que no se olvidan ni siquiera un momento, pero... no te sirve de nada recordarlo, si dependiera de ello... ah, otro gallo cantaría...:)
Hoy no quiero tomar nada, estoy malita.

Er Tato dijo...

¡Ah! ¿Entonces los currantes no se pueden coger los carnavales, la Semana Santa, el rocío, los dos meses de verano y la Navidad? ¡Coño, desde que soy diputado he perdido todo contacto con el pueblo, Karol_a! En fin, me voy a la feria a mezclarme con la chusma, a ver si recupero el filin con la plebe antes de las próximas elecciones. ¡Manolo, saca el coche oficial y la VISA de los langostinos y el jamón, que nos vamos al Real! ;-)

Besos, guapa

Karol_a dijo...

Pues mira Tato, si yo pido el rocío hay toda una plantilla piduiendolo, asi que me despido ya que no soy de la fila que le rie la gracia al jefe, eso una y otra que si tengo 22 dias no me llegan para todos esos eventos, y si me llega un año alguno de esas fechas, tengo que renunciar al verano, y asi un rosario de motivos. eso se queda para otros, ¿como tu?
jajaja, bueno pues nada disfruta.