jueves, 14 de marzo de 2013

¡Suerte maestro...!

Casi un 80% no sabe calcular la longitud de una circunferencia y el área del círculo que encierra en su interior. El 93% no sabe pasar de kilos a gramos, de hectáreas a metros cuadrados o de horas a minutos. El 45% no sabe distinguir "basta" y "vasta". Más de un 98% no saben por dónde pasan el Duero, el Ebro y el Guadalquivir.

Y no, no son alumnos de la ESO. Son titulados universitarios que se han preparado unas oposiciones para intentar ser maestros de esos alumnos de la ESO. A mí me cuesta creérmelo, pero lo dice El País.


17 comentarios:

ansiadalibertad dijo...

Esta mañana, con el cortado de turno, había leído la noticia.
Tampoco sabían situar Avila o Pamplona en el mapa.
Para los que ven el problema en los recortes - menos pasta - puede ser un dato, porque estos aspirantes vienen de 'otros recortes', los de la calidad y el sentido común, entre otras cosas.
La enseñanza se ha dado con el c... por demasiado tiempo. El dinero invertido es importante pero lo es más el tiempo y las posibilidades perdidos por tanta chorrada progreta y nazionata.

"¡Suerte maestros!"
"¡Suerte alumnos!"
"¡Suerte España!"

Un saludo
http://ansiadalibertad28012013.blogspot.com.es/

José Miguel Ridao dijo...

No me extraña, Tato, la LOGSE llega al otro lado de las aulas. Y es lo que nos queda, el daño que se ha hecho a la enseñanza perdurará durante generaciones.

Un abrazo.

Er Tato dijo...

Pues sí, ansiadalibertad, ¡suerte, España! Porque la vamos a necesitar.

Saludos

Er Tato dijo...

Pues fíjate, Ridao, que yo creo que el problema es más profundo que el de la mediocre calidad de la enseñanza. Es un problema de pérdida de valores, de desprecio por el trabajo bien hecho y por el esfuerzo, de conformismo. Yo me he enfrentado muchas veces en mi vida con malos, muy malos profesores -y también con profesores admirables, todo hay que decirlo-, y no me he sentado en una esquina a llorar lamentándome de que no me entero de nada, sino que me he buscado la vida para entender la materia en cuestión. Y eso que eran otros tiempos, sin los medios que actualmente tienen los alumnos a su disposición. Pero en fin...

Abrazos tristes

Anónimo dijo...

Y es que siempre has sido un monstruo, Tato. Un tío con dos cojones, de los de antes. Sí señor. ¿Y de qué te ha servido tantos sacrificio, tanta inteligencia? Tanto para llegar a pensar tan poco. Bueno, según se mire: hacen reír tus desequilibrios mentales en casi todo lo que tocas, tus agudos comentarios sin pizca de sectarismo, tus tonterías son eso: chorradas de un idiota que no sabe que lo es.

Zapateiro dijo...

¡Madre del Cordero!

Lamentablemente, conozco a muchos "maestros" que estudiaron Magisterio por ser una carrera facilona, facilona y que son expertos chuleteros. ¿Las oposiciones? No me parecen que formen, la formación es otra cosa.

En cuanto a la cultura del esfuerzo, ¿eso qué es lo que es?

La Universidad es un claro espejo de la crisis de valores que existe, desde el sistema de elección de Rectores hasta el método de aprobación de los planes de estudio.


Er Tato dijo...

No, Zapateiro, si las oposiciones no están para formar -se supone que a ellas hay que llegar formado-, están para cribar, pero vamos, que a este paso van a tener que usar una criba para melones, nunca mejor dicho.

Besos

Elisa dijo...

Comparto al 100% el comentario de Tato en respuesta a Ridao, el problema es más profundo.
Y no sé si sabéis que la presión a la que nos están sometiendo para que aprobemos más y suban las estadísticas. (No es que yo crea que el buen profesor tenga que suspender mucho, tampoco soy excesivamente dura, pero que intenten solucionar de esa forma los malísimos resultados es vergonzoso).

Er Tato dijo...

¡¡Vaya si lo sabemos, Elisa...!!

Por cierto, me alegra verte por aquí.

Besos

Elisa dijo...

Yo vengo por aquí de vez en cuando (y recomiendo tus entradas) pero si no tengo nada que decir, no dejo huella :).
Por cierto (ja, ja, me parezco a Umbral) ayer estuve en Relatos en Cadena. Me tumbaron, pero llegar allí fue para mí como poner un pie en la Luna.
Ah, y no te perdono que hayas abandonado la ficción, con lo bien que lo haces.
Besos de vuelta.

Er Tato dijo...

Que no mujer, que no la he abandonado, que sólo la tengo en reposo. Son tiempos convulsos, y no siempre lo urgente es lo importante. Pero amenazo con volver, por supuesto.

Vengo de leerte en Relatos en cadena. Muy bueno. Tienes que insistir, que en una de éstas te llevas el gato al agua.

Besos

Juanma dijo...

"No siempre lo urgente es lo importante"...da para pensar, tengo mis dudas. En todo caso, me sumo a la reprimenda: déjate caer con alguna historia tabernaria, ¿no?, es un poné.

Marcelino, mi profesor -catedrático él- durante la carrera de Historia de la Filosofía Clásica y Medieval (hablaba seis idiomas el coleguita, entre ellos latín y griegos antiguos -traducía los textos sobre la marcha como si estuviera leyendo español-) ya nos decía en 1990 que algo iba a pasar, que no era bueno ese tránsito tan radical entre la educación que él había recibido (pura la letra con sangre entra) y la que se comenzaba a impartir en los institutos por entonces. Que la suya, al fin y al cabo, le había ayudado a conseguir la cultura enciclopédica que tenía, pero que ni una cosa ni la otra, que al tiempo las consecuencias serían devastadoras. Hace veintitrés años y seguimos cayendo en picado. Mis niños, sólo con que consigan escribir sin faltas de ortografía, ya tendrán medio camino hecho.

En fin...

Un abrazo, Tato querido, y escribe algo de esas cositas...anda, porfiporfaporfi (que diría mi pequeña Adela).

Er Tato dijo...

Vayamos por partes, querido Juanma.

Primero.¿Y si te estás jiñando vivo mientras babeas viendo a tu pequeña Adela en su primera obra de teatro como protagonista, justo en la escena álgida de la obra, pendiente de tus reacciones? Es obvio que lo urgente no siempre es lo importante. Seguro que se te ocurren más ejemplos algo menos escatológicos.

Segundo. Marcelino tenía, tiene, razón. Ni tanto ni tan calvo. De todas formas, insisto, el fondo del asunto no es tanto cómo se enseña, siendo sin duda importante ese aspecto, sino cómo se exige. A estas alturas resulta claro que memorizar como una cacatúa no es aprender. Igual de claro resulta que no memorizar nada tampoco es aprender. Hay que memorizar lo suficiente para aprender a relacionar conocimientos, a conocer y acceder a todas las fuentes de información de las que disponemos en la actualidad, a saber asimilar esos conocimientos de forma crítica, a crear.

Tercero. Eres un mamoncete. ¿Que me deje caer con alguna historia tabernaria? ¿Que escriba alguna de mis cositas? Yo conozco a uno que está en el dique seco bloguero desde hace algunos años...

Un abrazo filósofo (y besos a Lola y a los enanos, que ya no serán tan enanos...)

P.S.: Sobre las consecuencias devastadoras y tal, sólo tienes que leer ocho comentarios más arriba...

Juanma dijo...

Primero: está bien, dejemos ejemplos escatológicos o no. Convencido con ese apretón que me aguantaría.

Segundo: que no sean capaces de llegar a un acuerdo definitivo, inamovible por tanto, sobre la educación es otra muestra de la incompetencia y zafiedad de nuestros queridos políticos. (por cierto, si te lees "Todo lo que era sólido", de mi Muñoz Molina, dame tu opinión. Es ensayo, no novela...que te conozco).

Tercero: escribo en facebook y ya sé tu opinión sobre eso. Vale, vale. Tengo dos novelas cortas presentadas a concursos pendientes de resolución. Ahora he iniciado un libro de poemas. Sigo en ello, ¿eh? Además, qué tendrá que ver lo uno con lo otro: abandono bloguilandia, yes, ¡¡pero tú no!!

Y el P.S., qué quieres que te diga. Paso.

Abrazos exbloguitantes y facebokeros (como si fuera Ridao el colgao)

Er Tato dijo...

Tomo nota del libro para este verano, Juanma. Gracias.

Recomendación por recomendación. El otro día vi "El profesor". Es cine independiente, pero a mí me pareció una película interesante. Vamos, que me gustó. Te la puedes bajar de muchos sitios, entre otros de aquí, gratis en la descarga regular.

Un abrazo

Lola dijo...

En Diciembre tendré, digamos la suerte, de cumplir 80 años y todavía estoy subida al carro de la vida y pienso morir con las botas puestas. Esto es un preámbulo o una excusa para decirte que me he he metido en tu blog sin permiso de nadie y ha empezado a gustarme. Acabo de escribir un post sobre los maestros y lo que yo pienso del tema, pero podía hacer sobre esto muchas reflexiones más.
Un saludo. Lola
htt://boheme.zruspas.org

Er Tato dijo...

Bueno Lola, con casi 80 años ya y con esas ganas. ¡Qué envidia...! Bienvenida a la taberna. Y no te preocupes, aquí se entra sin llamar. Como ya es costumbre, a la primera invita la casa. Muchas gracias por tu visita.

Un saludo